¿Qué es la cerveza sin pasteurizar?

¿Sabías que existe la cerveza sin pasteurizar? Estas son todas sus características

Autor: Cervezas Ambar

Ambar Morena
Como buen apasionado de la cerveza que eres, seguro que ya estás al tanto de que existen muchos tipos y estilos de cerveza diferentes, cada uno con sus propias características y cualidades. Pero ¿sabías una de las distinciones más importantes es si se trata de una cerveza sin pasteurizar o una cerveza pasteurizada?

El proceso de pasteurización se hace por una serie de razones pero lo cierto es que puede afectar al producto final en varios aspectos como pueden ser el sabor, la textura, la frescura e incluso la conservación de la bebida.

Hoy queremos explorar qué es la cerveza sin pasteurizar, su características propias y cómo puedes disfrutarla al máximo.

Brindis de año nuevo

 

¿Qué es la pasteurización en la cerveza?

 

El proceso de pasteurización, descubierto por Louis Pasteur en el siglo XIX, consiste en someter a un alimento o una bebida a una temperatura elevada durante un breve periodo de tiempo, con el fin de eliminar o reducir los microorganismos que puedan causar su deterioro o producir enfermedades.

La pasteurización se aplica a muchos productos que se comercializan de forma masiva, como la leche, el queso, el yogur, el zumo, el vino y también a la cerveza. Uno de los principales motivos es facilitar que estos productos aguanten más tiempo sin echarse a perder.

En el caso de la cerveza, la pasteurización debe realizarse después de la fermentación de la cerveza, que es el proceso en el que el azúcar se transforma en alcohol y dióxido de carbono gracias a la acción de las levaduras y puede hacerse antes o después del envasado, al final de proceso de elaboración de la cerveza.

¿Qué es una cerveza sin pasteurizar?

 

Una cerveza sin pasteurizar es aquella que no ha sido sometida a ningún proceso de pasteurización. Esto significa que la cerveza conserva todas las levaduras y otras sustancias que se han generado durante la fermentación, y que pueden seguir actuando sobre la cerveza una vez envasada.

También puedes encontrar este tipo de cerveza con otros nombres como cerveza viva, cerveza cruda o cerveza fresca.

Hay quien piensa que la diferencia entre cerveza artesanal e industrial es, precisamente, el proceso de pasteurización. Sin embargo, estamos aquí para sacarte de tu error. Hay muchas cervezas sin pasteurizar que son industriales y también las hay artesanas que se sí se someten a este proceso.

Lo que sí es cierto es que la mayoría de las cervezas sin pasteurizar son de producción artesanal, ya que los grandes fabricantes suelen pasteurizar sus cervezas para garantizar su estabilidad y homogeneidad.

 

¿Cuáles son las características de la cerveza sin pasteurizar?

 

Una de las razones por las que muchas personas empiezan a preferir las cervezas sin pasteurizar, es porque la pérdida de bacterias también supone una pérdida de propiedades. La cerveza sin pasteurizar, por lo tanto, se caracteriza por tener un sabor más intenso, complejo y natural, ya que mantiene todos los aromas y sabores que le aporta la combinación específica de agua, malta, lúpulo y levadura. Además, la cerveza sin pasteurizar tiene más cuerpo, textura y espuma, ya que conserva todo el dióxido de carbono que se produce durante la fermentación.

 

La cerveza sin pasteurizar ¿es segura?

 

Seguramente estás pensando que, si el proceso de fermentación afecta tanto al sabor de la cerveza, tiene que haber una buena razón para que esté tan extendido. Y no andas desencaminado. Cuando Louis Pasteur inventó esté proceso, la cerveza y otras bebidas como el vino, eran muy inestables y, además, el uso de refrigeración no estaba tan extendido como lo está ahora, ni los productores seguían las estrictas normativas sanitarias y de seguridad que se exigen ahora. Por lo tanto, las posibilidades de que el producto se estropeara antes de llegar al consumidor si no se pasteurizaba la cerveza, eran mucho más altas.

En la actualidad, la cerveza sin pasteurizar es una bebida totalmente segura. No contiene ningún patógeno que pueda causar enfermedades, ya que el alcohol, el lúpulo y la acidez de la cerveza actúan como conservantes naturales. Sin embargo, la cerveza sin pasteurizar es más sensible a los cambios de temperatura, la luz y el oxígeno y estos pueden afectar a su sabor, color, aroma y carbonatación.

Por este motivo, debe guardarse en un lugar fresco, oscuro y seco, y consumirse antes de la fecha de caducidad indicada por el productor. Además, la cerveza sin pasteurizar debe servirse con cuidado, evitando agitarla o moverla demasiado, y vertiéndola lentamente en el vaso de cerveza más adecuado, para evitar que se forme demasiada espuma o que se mezclen los sedimentos.

 

¡Anímate a probar la cerveza sin pasteurizar y descubre nuevos sabores y sensaciones! Eso sí, recuerda que, igual que la cerveza pasteurizada, hay que disfrutarla con moderación.

 

Tortitas sirope de Ambar Montañesa

Abremesa con Soul in the kitchen

Aprende a cocinar unas tortitas de desayuno convertidas en una torre coronada con unas tiras de bacon crujiente, un huevo frito y sirope de ...

Bizcocho con cerveza Ambar IPA

Abremesa con Soul in the kitchen

¿Habías pensado alguna vez que podías añadirle cerveza a tu bizcocho? Nunca es tarde, ve abriendo una Ambar IPA, que nos ponemos al lío...

El día que terminó la Ley Seca. Anécdotas cerveceras de la historia.

Se cumplen 90 años del fin de 'The Prohibition', una época marcada en Estados Unidos.

El día que acabó la Ley Seca en Estados Unidos marcó un hito en la historia cervecera. Te contamos qué sucedió.