Cerveza sin filtrar: Qué es y por qué deberías probarla

¿Qué es la cerveza sin filtrar?

Como ya sabrás, en el proceso de elaboración de la cerveza, hay una parte muy importante conocida como filtrado, durante la cual se eliminan las partículas sólidas que se encuentran en suspensión y que se han generado durante todos los pasos anteriores.

Sabiendo esto, es fácil adivinar que la cerveza sin filtrar es aquella que no ha pasado por el proceso de filtración. Por lo tanto, se consigue un tipo de cerveza que aún puede incluir trazas de levadura, proteínas y restos de lúpulo, todos ellos ingredientes cruciales que se utilizan para fabricar cerveza y que aportan tanto sabor como textura al producto final.

Al no filtrarse, la cerveza conserva su carácter natural y auténtico, lo que resulta en un producto final más robusto y lleno de matices.

¿Cómo se hace la cerveza sin filtrar?

El proceso de elaboración de este tipo de cerveza es muy similar al de la cerveza tradicional, con la diferencia principal de que, después del proceso de fermentación, el caldo no se somete a un proceso de filtración. Al finalizar esa etapa de fermentación, la cerveza se enfría y se embotella o se empaqueta directamente, conservando así todas las partículas en suspensión. Este proceso permite que la cerveza mantenga su sabor fresco y sus características naturales intactas.

¿Cuáles son sus características?

Si ha ganado tanta popularidad, es porque la cerveza sin filtrar tiene varias características únicas que la hacen destacar entre otras variedades de cerveza y que conquistan al público general. No hace falta ser un maestro cervecero para poder apreciar todos los matices que ofrece.

En primer lugar, el color de la cerveza suele ser un poco más turbio debido a la presencia de sedimentos en suspensión. Además, tiende a tener un sabor más complejo y robusto, con notas que van desde lo afrutado hasta lo terroso, dependiendo de los ingredientes y el proceso de elaboración utilizado. Su textura también puede ser más densa y cremosa debido a la presencia de levadura y proteínas.

Diferencia entre cerveza filtrada y sin filtrar

La principal diferencia entre la cerveza filtrada y sin filtrar radica en el proceso de filtración al final de la fermentación. Mientras que la cerveza filtrada se somete a este proceso para eliminar las partículas sólidas, la cerveza sin filtrar conserva estas partículas, lo que le confiere un sabor y una textura más rica y compleja. Además, tiende a tener una vida útil más corta debido a la presencia de levadura activa, lo que puede contribuir a su perfil de sabor en constante evolución.

1900 Sin Filtrar de Ambar

El mejor ejemplo de cerveza sin filtrar que podemos darte es nuestra «1900 Sin Filtrar». Esta cerveza, se elabora siguiendo el método más tradicional, igual que se hacía en 1900 e incluyendo tres variedades distintas de lúpulo, lo cual garantiza un sabor fresco y vibrante con notas frutales y un carácter distintivo.

Su aspecto turbio y su textura suave la convierten en una opción popular entre los aficionados a las cervezas artesanales que buscan experiencias cerveceras auténticas y memorables.

La cerveza sin filtrar destaca por su sabor y su carácter únicos. Al conservar todas las partículas naturales en suspensión, ofrece una experiencia de sabor más rica y compleja que la cerveza filtrada convencional. Con su creciente popularidad y la variedad de opciones disponibles en el mercado, continúa cautivando a los amantes de la cerveza en busca de nuevas y emocionantes experiencias cerveceras.