Diferencias entre cerveza artesanal e industrial

La cerveza se ha puesto de moda, pero la cerveza artesanal se ha puesto MUY de moda. Y como en todas las modas, hay una parte importante del reconocido postureo. Así que cuando se habla mucho sobre un tema, se generan conversaciones y se cuentan cosas muy interesantes para el público que no es experto. Pero hay que estar ojo avizor, porque también algunas tonterías. De estas, muchas quedan en anécdota, y otras por repetirlas mil veces llevan a la desinformación.

Esto está sucediendo también con las supuestas diferencias entre cerveza artesanal y cerveza industrial y son precisamente, estas distinciones entre una y otra las que vamos a confirmar o desmentir en este artículo.

También queremos aprovechar para recomendaros el reportaje del Comidista sobre postureo y cerveza, si no lo habéis visto haced un paréntesis en la lectura y dadle al play ahora mismo.

Diferencias entre cerveza artesanal e industrial que no son verdad

Dicho esto, aquí va un recopilatorio de comparaciones que hemos leído últimamente sobre esta “guerrilla” entre cerveza artesanal e industrial.  Y antes de que corran ríos de tinta sobre este artículo, queremos aclarar que nos encantan las cervezas, las buenas cervezas, artesanales o industriales. Nos encanta la variedad, el ejercicio creativo y el espíritu del movimiento artesanal. Es más, nos sentimos partícipes. Pero hay algunas declaraciones que son generalizaciones o que, directamente, no son ciertas.

1. La diferencia entre una artesanal y una industrial es que la artesanal está hecha con ingredientes 100% naturales: Mmm… a las industriales no les sale todavía rentable sintetizar, o clonar la materia prima. No vamos a citar una fuente porque lo leemos constantemente. Vamos a decirlo así, todas las cerveceras usan los mismos ingredientes como base (cereal, agua, lúpulo, levadura…) aunque algunos fabricantes artesanales huyen de conservantes, colorantes y estabilizantes… Y algunos industriales también.
2. La cerveza artesanal no da resaca. Ojipláticos nos quedamos con semejante afirmación. No que va… seguro que si se te va la mano con la cerveza artesanal en lugar de resaca te provoca un alegre despertar rodeado de ninfas en el bosque, porque los artesanos de este gremio sustituyen el alcohol por arcoíris de colores.
3. Sin filtrar es mejor. Cuando tu amigo el que sabe de todo te diga que una buena cerveza tiene que estar sin filtrar, borra su contacto de Whatsapp.  Hay cervezas estupendas filtradas y sin filtrar. Cuando dejas sin filtrar una cerveza añades el sabor de la levadura, que puede gustarte o no. Además, puede seguir fermentando y por tanto el producto es menos estable ya que si su conservación no es óptima sufre mayor deterioro que una cerveza filtrada. Además, por definición hay estilos de cerveza que requieren filtrado y otros que no. Una pils es siempre filtrada y una hefe será siempre sin filtrar. En este sentido nos encantó leer este artículo de Lúpulo Adicto en el que se postula a favor del filtrado en la cerveza artesanal, y tan interesante como las líneas que escribe el autor es el foro de debate que puedes encontrar en los comentarios.
4. La cerveza artesanal es de mayor calidad:  La realidad es que hay de todo en todas partes; bueno, malo y regular. Para elaborar una buena cerveza hay que escoger una materia prima de excelente calidad, poner a partes iguales pasión y conocimiento en la elaboración y mimar todo el proceso, desde los campos de cereal hasta el grifo en el que se tirará esa cerveza. Por supuesto, estamos convencidos de que nada tienen que ver las pequeñas producciones con las masivas. Por eso defendemos la cultura cervecera frente a la homogeneización de los sabores, y en ese convencimiento, a todos aquellos cerveceros que como nosotros disfrutan de su oficio, independientemente de su tamaño o de la etiqueta del botellín.

Diferencias entre la cerveza artesanal e industrial que sí son verdad

A pesar de los mitos anteriores, sí que hay algunas diferencias entre la cerveza artesanal y la industrial que merece la pena destacar porque sí son distinciones reales:

1. La cerveza industrial suele estar pasteurizada: Aunque también es posible encontrar ejemplos de cerveza fresca o sin pasteurizar en el mercado, la cerveza industrial suele pasteurizarse y utilizar también algún tipo de conservante (que no siempre es artificial). Esto se debe a que las cervezas industriales suelen distribuirse a gran escala, requiriendo una mayor estabilidad y longevidad del producto para que este pueda viajar más lejos y durante más tiempo, sin alterarse ni echarse a perder.
2. La cerveza industrial utiliza procesos automatizados: Puesto que la producción es mucho mayor, se requiere que algunos de los procesos de la elaboración de la cerveza estén automatizados. Esto no significa que no haya maestros cerveceros y otras personas monitorizando los procesos y creando las recetas.
3. La cerveza industrial es un producto más homogéneo: La producción a gran escala, con su respectiva automatización, tiene como resultado un producto mucho más medido al milímetro y exacto, que pueda garantizar la calidad y estabilidad de la cerveza final. Por lo tanto, la cerveza industrial que compras habitualmente siempre tendrá el mismo sabor que tanto disfrutas. La cerveza artesanal, por otro lado, puede ofrecer más variedad de sabores incluso en cervezas con la misma etiqueta.

Como puedes ver, la cerveza artesanal y la industrial, en realidad no son tan diferentes. Lo importante es que exista la variedad para que puedas escoger en cada momento aquella cerveza que más te apetezca.