CERVECEROS INDEPENDIENTES
¿PERO QUÉ QUEREMOS DECIR?
Antaño tuvimos un gran claim publicitario que caló hasta las entrañas de nuestros paisanos y que todavía resuena en el recuerdo popular zaragozano; Ambar la cerveza que te pone bien. Venía a colación de una divertida campaña publicitaria que lanzamos allá por el año 86 (podéis verla aquí). Por aquel entonces ganó el primer León de Cannes del sector cervecero español y a día de hoy hubiera puesto los pelos de punta a cualquier organismo de autorregulación publicitaria. Aquel sonsonete derivó bien entrados los 90 en un no menos mítico “Ponte Ambar” que para quienes habían disfrutado y compartido con nosotros era una afirmación rotunda y llena de significado. ¿Era este concepto capaz de definirnos en un nuevo panorama mucho más abierto en términos geográficos? La respuesta, para el pesar de los más nostálgicos, era no.
Así tras un ejercicio de mucho pensar y repensar la marca y hacernos las preguntas fundamentales sobre la existencia (quiénes somos, de dónde venimos y a dónde vamos) dimos con el concepto de Ambar, Cerveceros Independientes y nos parecía que este sí podía decir mucho de quienes éramos nosotros y sobre todo, de cómo hacíamos.
Y aunque por el mismo semántica algo se intuye, la gente nos pregunta, ¿pero qué significa exactamente eso de cerveceros independientes? Y aunque el camino se hace andando hemos querido pararnos a explicar la frase que nos posiciona y al mismo tiempo declara nuestras intenciones en dos ideas fundamentales:
1. Una de cada tres cervezas que se beberán hoy en el mundo pertenecen a la misma empresa multinacional. Y en ese maremágnum de adquisiciones, fusiones y homogeneizaciones de gigantes nosotros seguimos siendo los dueños de nuestro sino, bajo los mismos ladrillos que nos vieron nacer hace más de 100 años.
2. Nos apasiona nuestro oficio. No es que hagamos cerveza, es que SOMOS CERVECEROS, y es nuestra manera de hacer lo que nos convierte en independientes.
– Porque hacemos la cerveza que nos gusta hacer, no la más barata, no la más vendida, hacemos la cerveza que creemos que tenemos que hacer.
– Porque hacemos cerveza para personas y para momentos y no para mercados y esto nos ha hecho elaborar 17 tipos de cerveza (y siempre creciendo).
– Porque mantenemos una maltería, propia e ineficiente, con maquinaria de los años 30 porque nos encanta poder llevar a cabo el proceso completo de elaboración, por puro romanticismo cervecero y porque para un amante de este líquido ancestral no hay nada como estar en una fábrica de cerveza y oler a cereal mojado y al tueste de la malta.
– Porque nos encanta experimentar con ingredientes y con procesos. Coger nuestros 100 años de conocimientos y jugar con ellos, divertirnos y divertir a los demás. Combinar métodos tradicionales con la tecnología más moderna para mirar atrás y recuperar las recetas más antiguas.
En definitiva, Cerveceros Independientes es tener la suerte de dedicarnos a lo que más nos gusta y poder hacerlo como más nos gusta.