Lo importante no solo está en el interior
El resultado es una cerveza con notas rojizas distinta desde el comienzo. La parte más dulce de esta Ambiciosa se deja notar por la nariz, con el aroma, con las notas frescas extraídas de su corteza tan delicadamente. Sin embargo, sorprende en paladar con tonos amargos, diferentes a lo habitual en la cerveza, gracias a la combinación tan característica de la naranja con el lúpulo que hay detrás. “Esa es la gracia de esta cerveza”. “Un homenaje al pasado, un ejercicio para entender de dónde venimos y mirar hacia dónde vamos”, según Antonio Fumanal.